El colesterol que circula por
el organismo procede de dos fuentes: uno lo fabrica el propio
organismo ( endógeno) y otro llega desde la dieta ( exógeno). En
contra del colesterol endógeno poco se puede hacer ya que viene
marcado genéticamente, pero el exógeno si que se puede controlar.
¿QUÉ COMER ?
- El SALVADO DE AVENA es un eficaz reductor del colesterol. Tomar unos 25gr con los cereales del desayuno o en un zumo de frutas.
- Tomar un DIENTE DE AJO CRUDO por las mañanas junto con una cucharada de ACEITE DE OLIVA tambiÉn contribuye a reducir el colesterol. ( a continuación mascar unas ramitas de perejil para reducir el aroma del ajo)
- La CEBOLLA CRUDA O COCIDA tiene los mismo efectos.
- Alimentos ricos en ácido linoleico: PIPAS DE GIRASOL O CALABAZA, NUECES Y GERMEN DE TRIGO.
- PAN INTEGRAL, AVENA, CEREALES INTEGRALES, PAN Y GALLETAS DE CENTENO.
- Frutas secas: HIGOS, ALBARICOQUES ( orejones) o PASAS.
- Frutas frescas: MANZANA, PERA Y PLÁTANO.
- ALCACHOFA COCIDA, beber el caldo de la cocción para estimular la función hepática.
- ALGA ESPIRULINA Y LECITINA DE SOJA.
- Alimentos ricos en pectina: ZANAHORIA, MANZANA, REPOLLO O BRÉCOL.
- Añadir HOJITAS DE ROMERO picadas en los platos, ya que elimina los ácidos biliares.
¿QUÉ BEBER?
- El ESPINO BLANCO en infusión ayuda a disolver los acumulos de grasas de las arterias.
- El TÉ ayuda a regular las tasas de colesterol perjudicial.
- La infusión de TÉ OOLONG es eficaz para reducir el colesterol tras una comida grasa.
- Un vasito de VINO TINTO en cada comida ayuda a aumentar las tasas de colesterol beneficioso (HDL), pero es muy importante no pasarse de la dosis.
- Infusiones de ORTOSIFÓN, diurético y estimulante de la función biliar.
¿QUÉ REDUCIR O EVITAR?
- ALIMENTOS GRASOS SATURADOS: MANTEQUILLA, LECHE ENTERA, EMBUTIDOS, CARNE ROJA, PATÉ, HAMBURGUESAS Y MARGARINA.
- ELIMINAR BOLLERÍA, DULCES Y CHOCOLATE.
- SUPRIMIR TODO TIPO DE VÍSCERAS: HÍGADO, RIÑONES, SESOS, CORAZÓN U OTROS.
Los niveles de colesterol total pueden considerarse bajos hasta el nivel 200mg; entre 200 y 240 mg son niveles normales y es a partir de los 250 mg es cuando debemos empezar a preocuparnos y seguir un control periódico. Sí hay que tener muy en cuenta que podemos diferenciar 2 tipos de colesterol: HDL y LDL. El colesterol HDL es esencial para el buen funcionamiento de nuestro metabolismo, sin embargo el LDL es perjudicial, puede causarnos problemas cardiovasculares. Por esto, alimentos como el pescado azul o los frutos secos son muy recomendables, ya que aunque aporten gran cantidad de grasas se trata de ácidos grasos poliinsaturados, nos ayudaran a aumentar niveles de colesterol HDL y reducir el LDL.
Recordad que ¡somos lo que comemos! Es indispensable cuidar nuestra alimentación en base a las necesidades personales.